Fast Fashion: Estilo que destruye.
En el mundo de la viralidad el fast fashion se ha coronado como el rey de mantenerte a la moda sin dejarte en la pobreza. Pero, ¿alguna vez te has detenido a pensar en cuánto vale realmente ese pantalón que compraste por impulso? Lo que parece una ganga en tu carrito tiene un precio mucho más alto de lo que imaginas.
El fast fashion, esa moda rápida que nos llena de ofertas con miles de nuevos estilos cada semana, parece la solución perfecta para satisfacer nuestras ansias de estar siempre a la última.
Sin embargo, detrás de esas tendencias fugaces se ocultan efectos devastadores para el medio ambiente, los derechos laborales y, en última instancia, para nuestra propia salud como consumidores.

Condiciones laborales precarias:
Millones de personas trabajan en fábricas con sueldos bajos y sin seguridad.

Impacto ambiental: El fast fashion es responsable del 10% de las emisiones globales de carbono y del desperdicio masivo de agua. No solo eso, ¿Sabías que uno de los vertederos de ropa más grandes del mundo se encuentra en Chile?
¿Sabías que uno de los vertederos de ropa mas grandes del mundo se está en chile?
No se trata de dejar de comprar, sino de comprar con conciencia
Es cierto, todas nuestras acciones tienen consecuencias. Sería inocente pensar que podemos transitar por la vida sin dañar el medio ambiente. Pero, ¿y si buscamos un punto medio? No se trata de rechazar la moda rápida por completo, sino de aprender a elegir con responsabilidad. Jamás me leerás decirte que no compres algo que te gusta, o que te juzgue por el origen de tu ropa. Al contrario, quiero que te sientas seguro de usar lo que te haga sentir más como tú mismo.
En mood la moda es una forma de expresión, pero también una oportunidad para hacer el bien. Como héroes de nuestro estilo, amigos del planeta y creadores de nuevas tendencias, podemos:
- Apostar por marcas éticas y sostenibles.
- Practicar el upcycling y dar nueva vida a nuestra ropa.
- Comprar de segunda mano o intercambiar prendas.
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